El próximo 21 de Octubre, jueves, a las 20,30 horas, se celebra en Salón de Actos del Ilustre Colegio Oficial de Médicos de la Provincia de Málaga, situado en Calle Curtidores, 1 y a beneficio de FMAEC, un concierto interpretado por Los Tres Tenores de la Compañia Teatro Lírico Andaluz. Se representarán canciones internacionales de toda la vida y arias de Opera de difícil ejecución. La duración del concierto es de 1 hora, aproximadamente. Si estais interesados en comprar o reservar entradas, el precio de todas las localidades es de 15 € y se pueden adquirir en la sede de la Fundación, Av. Plutarco, 73, Bloque 5, 2º B,(zona Teatinos), reservar en el teléfono 952 12 17 17 o en el correo electrónico: administracion@fmaec.org. indicando nombre y apellidos y número de localidades a reservar. Estas se podrán recoger y abonar en la entrada del Salón de Actos del Ilustre Colegio de Médicos, 30 minutos antes del comienzo.
Información:
Teatro Lírico Andaluz: http://www.teatroliricoandaluz.com/
Fundación Malagueña de Asistencia a Enfermos de Cáncer
FMAEC : http://www.fmaec.org/
administracion@fmaec.org
Av. Plutarco, 73 Bloque 5, 2º B
29010 Má¡laga
Tlf. Fax: 952 12 17 17
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Andrés Tello Romero
"Perchelero"
telloromero@gmail.com
09 septiembre 2010
LOCUCION DE FEDERICO GARCIA LORCA
Locución de Federico García Lorca al Pueblo de Fuente de Vaqueros ( Granada ). Septiembre 1931.
"Cuando alguien va al teatro, a un concierto o a una fiesta de cualquier índole que sea, si la fiesta es de su agrado, recuerda inmediatamente y lamenta que las personas que él quiere no se encuentren allí. ‘Lo que le gustaría esto a mi hermana, a mi padre’, piensa, y no goza ya del espectáculo sino a través de una leve melancolía. Ésta es la melancolía que yo siento, no por la gente de mi casa, que sería pequeño y ruin, sino por todas las criaturas que por falta de medios y por desgracia suya no gozan del supremo bien de la belleza que es vida y es bondad y es serenidad y es pasión.
Por eso no tengo nunca un libro, porque regalo cuantos compro, que son infinitos, y por eso estoy aquí honrado y contento de inaugurar esta biblioteca del pueblo, la primera seguramente en toda la provincia de Granada .
No sólo de pan vive el hombre. Yo, si tuviera hambre y estuviera desvalido en la calle no pediría un pan; sino que pediría medio pan y un libro. Y yo ataco desde aquí violentamente a los que solamente hablan de reivindicaciones económicas sin nombrar jamás las reivindicaciones culturales que es lo que los pueblos piden a gritos. Bien está que todos los hombres coman, pero que todos los hombres sepan. Que gocen todos los frutos del espíritu humano porque lo contrario es convertirlos en máquinas al servicio de Estado, es convertirlos en esclavos de una terrible organización social.
Yo tengo mucha más lástima de un hombre que quiere saber y no puede, que de un hambriento. Porque un hambriento puede calmar su hambre fácilmente con un pedazo de pan o con unas frutas, pero un hombre que tiene ansia de saber y no tiene medios, sufre una terrible agonía porque son libros, libros, muchos libros los que necesita y ¿dónde están esos libros?
¡Libros! ¡Libros! Hace aquí una palabra mágica que equivale a decir: ‘amor, amor’, y que debían los pueblos pedir como piden pan o como anhelan la lluvia para sus sementeras. Cuando el insigne escritor ruso Fedor Dostoyevsky, padre de la revolución rusa mucho más que Lenin, estaba prisionero en la Siberia, alejado del mundo, entre cuatro paredes y cercado por desoladas llanuras de nieve infinita; y pedía socorro en carta a su lejana familia, sólo decía: ‘¡Enviadme libros, libros, muchos libros para que mi alma no muera!’. Tenía frío y no pedía fuego, tenía terrible sed y no pedía agua: pedía libros, es decir, horizontes, es decir, escaleras para subir la cumbre del espíritu y del corazón. Porque la agonía física, biológica, natural, de un cuerpo por hambre, sed o frío, dura poco, muy poco, pero la agonía del alma insatisfecha dura toda la vida.
Ya ha dicho el gran Menéndez Pidal, uno de los sabios más verdaderos de Europa, que el lema de la República debe ser: ‘Cultura’. Cultura porque sólo a través de ella se pueden resolver los problemas en que hoy se debate el pueblo lleno de fe, pero falto de luz.
"Cuando alguien va al teatro, a un concierto o a una fiesta de cualquier índole que sea, si la fiesta es de su agrado, recuerda inmediatamente y lamenta que las personas que él quiere no se encuentren allí. ‘Lo que le gustaría esto a mi hermana, a mi padre’, piensa, y no goza ya del espectáculo sino a través de una leve melancolía. Ésta es la melancolía que yo siento, no por la gente de mi casa, que sería pequeño y ruin, sino por todas las criaturas que por falta de medios y por desgracia suya no gozan del supremo bien de la belleza que es vida y es bondad y es serenidad y es pasión.
Por eso no tengo nunca un libro, porque regalo cuantos compro, que son infinitos, y por eso estoy aquí honrado y contento de inaugurar esta biblioteca del pueblo, la primera seguramente en toda la provincia de Granada .
No sólo de pan vive el hombre. Yo, si tuviera hambre y estuviera desvalido en la calle no pediría un pan; sino que pediría medio pan y un libro. Y yo ataco desde aquí violentamente a los que solamente hablan de reivindicaciones económicas sin nombrar jamás las reivindicaciones culturales que es lo que los pueblos piden a gritos. Bien está que todos los hombres coman, pero que todos los hombres sepan. Que gocen todos los frutos del espíritu humano porque lo contrario es convertirlos en máquinas al servicio de Estado, es convertirlos en esclavos de una terrible organización social.
Yo tengo mucha más lástima de un hombre que quiere saber y no puede, que de un hambriento. Porque un hambriento puede calmar su hambre fácilmente con un pedazo de pan o con unas frutas, pero un hombre que tiene ansia de saber y no tiene medios, sufre una terrible agonía porque son libros, libros, muchos libros los que necesita y ¿dónde están esos libros?
¡Libros! ¡Libros! Hace aquí una palabra mágica que equivale a decir: ‘amor, amor’, y que debían los pueblos pedir como piden pan o como anhelan la lluvia para sus sementeras. Cuando el insigne escritor ruso Fedor Dostoyevsky, padre de la revolución rusa mucho más que Lenin, estaba prisionero en la Siberia, alejado del mundo, entre cuatro paredes y cercado por desoladas llanuras de nieve infinita; y pedía socorro en carta a su lejana familia, sólo decía: ‘¡Enviadme libros, libros, muchos libros para que mi alma no muera!’. Tenía frío y no pedía fuego, tenía terrible sed y no pedía agua: pedía libros, es decir, horizontes, es decir, escaleras para subir la cumbre del espíritu y del corazón. Porque la agonía física, biológica, natural, de un cuerpo por hambre, sed o frío, dura poco, muy poco, pero la agonía del alma insatisfecha dura toda la vida.
Ya ha dicho el gran Menéndez Pidal, uno de los sabios más verdaderos de Europa, que el lema de la República debe ser: ‘Cultura’. Cultura porque sólo a través de ella se pueden resolver los problemas en que hoy se debate el pueblo lleno de fe, pero falto de luz.
Septiembre de 1931
Este texto nos lo ha enviado María Herrera Palacios, al correo de Amaduma y siendo quién fué su creador y el contenido del mismo, pienso que su lectura actualmente es muy interesante para hacernos reflexionar dado los tiempos que corren. ¿ Que os parece ? , espero lo disfruteis.
Joaquín G.
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08 septiembre 2010
MEDIEVALIZACIÓN DE OCCIDENTE.
Desde mis tiempos de estudiante yo conocía a Nicolás Berdiaeff por dos de sus obras, entonces en boga: “El cristianismo y el problema del comunismo” y “El cristianismo y la lucha de clases” (los tengo llenos de polvo archivados en el cuarto trastero). Pero no conocía “Hacia una nueva edad media”.
Estamos hablando de los años 30, de un ruso, anticomunista, expatriado, marxista en un principio, porque sólo veía en él el aspecto pragmático, la defensa del obrero esclavizado por el capital,…., antizarista, con un espíritu crítico y libre, que le pega puyazos a la iglesia ortodoxa rusa, pero que, después, critica al bolchevismo, contra el que publica “Filosofía de la desigualdad”, desterrado a Siberia, obligado a errar por Europa y que morirá en París.
Ideológica y filosóficamente queda inscrito en lo que pudiéramos llamar “existencialismo personalista cristiano”
Ya en los años 30 avisa de la medievalización de la sociedad.
Lo mismo que hará Umberto Ecco en los años 70, previniendo a la sociedad de lo que le está viniendo encima, una nueva Edad Media. La nueva embestida de los países islámicos, provenientes de oriente y del sur, religiosos fanáticos, que emprenden una nueva cruzada, pero, en este caso, al revés, contra el Occidente laico, científico y tecnológico.
¿Estamos en trance de asistir a una nueva medievalización del mundo Occidental?. ¿Corremos el peligro de volver a tiempos pasados, de descorrer el camino recorrido desde la Edad Media, tras haber pasado por la fase de ruptura renacentista y haber proclamado el triunfo de la Diosa Razón sobre el Dios de la Creencia y haber desarrollado todo el potencial revolucionario, de todo tipo, que nos ha traído hasta el ahora mismo de nuestra civilización?.
De un tiempo a esta parte se nos están desarmando, tambaleando, los esquemas mentales, racionales, laicos, occidentales, ante la llegada de pueblos con mentalidades muy distintas.
Cuando hablamos de Edad Media estamos hablando de ella, pero desde fuera de ella. Nadie dice “estoy en la Edad media”. Todos afirman estar en la Edad Contemporánea.
Nosotros, los occidentales europeos, miramos hacia atrás, tomamos en nuestras mentes todo el tiempo histórico recorrido y lo compartimentamos en edades. Llamamos Edad Antigua a nuestro pasado fenicio, griego y romano; llamamos Edad Media al período transcurrido entre la invasión de los bárbaros y la consiguiente desmembración del Imperio Romano de Occidente y el siglo XV, en el que se produce una ruptura con la mentalidad religiosa desde dentro con la Reforma, y desde fuera, con la racionalidad científica, como explicación de este mundo y ruptura o superación de la sociedad feudal, con la aparición de las nuevas monarquías. El fruto de todo esto lo llamamos Edad Moderna, hasta desembocar en la Edad Contemporánea.
Cada cultura y/o civilización ha pasado por etapas. Cuando Europa estaba en la Edad Antigua, Egipto, Ariria-Babilonia, China,… estaban en niveles superiores.
Hoy mismo, nosotros estamos donde estamos y vemos culturas africanas que están donde están.
Podemos hacer un estudio comparativo y ver ciertos paralelismos entre lo que ocurrió en la Edad Media y lo que está ocurriendo/acaba de ocurrir en nuestro mundo occidental.
1.- Por ejemplo, la Pax Romana, vigente durante tanto tiempo, se vino abajo cuando la presión de los pueblos bárbaros irrumpieron por la frontera Rhin-Danubio, unos, que ya estaban dentro, decidieron quedarse y otros, que estaban fuera, “saltaron la valla” y la pax romana se difumina y desaparece. Lo que viene después es ya otra cosa.
La llamada “pax americana” o “guerra fría” mantenía el equilibrio, por miedo y temor a una guerra nuclear, entre dos grandes bloques: el mundo occidental y el bloque soviético, con su telón de acero como frontera (para que “no salgan”, decíamos nosotros; para que “no entren”, decían ellos). Dos mundos y dos concepciones políticas, sociales y económicas distintas, el capitalismo occidental, con el lema de la “libertad” (política, económica, social, de expresión, de religión,……) y el capitalismo de estado, todo centralizado y programado, sin espacios para la libertad, con ideología única, mano de hierro,…
La caída del muro de Berlín y la occidentalización de muchos, (si no todos) los países del lado de allá del telón de acero, es como la llegada y la estancia definitiva entre nosotros de los antiguos bárbaros.
Europa es ya mucho más que la Europa antes de la caída del muro, como la Europa medieval es ya otra Europa distinta a la de la pax romana.
Ni que decir tiene la Europa actual, la Comunidad Económica Europea, sin fronteras políticas y económicas de casi todas las naciones.
2.- Invasiones e inmigración. Si el limes romano, para impedir la entrada de los pueblos bárbaros, medía unos 874 kilómetros, como frontera entre dos civilizaciones, el Telón de Acero, entre la Europa Oriental y la Occidental, en el siglo XX, medía 3.600 Kilómetros, del Báltico al Adriático, que también se vendría abajo ante los intentos interiores (Hungría y Checoslovaquia (“la primavera de Praga) y la presión occidental, externa, siendo la caída del muro de Berlín (ciudad, también, dividida) el comienzo del fin del Bloque Oriental.
Todavía hoy se levantan muros físicos entre Israel y Palestina, entre Estados Unidos y Méjico… y muros de papel, con pasaportes, aduanas…
A pesar de ello, tanto entre los romanos como entre nosotros, las inmigraciones, legales o ilegales, no saben de fronteras cuando se les presentan las hambrunas y hay que echar a correr allí donde hay comida.
A los alamanos, suevos, vándalos, godos…. los suceden, hoy, los turcos, los orientales, los iberoamericanos, los chinos, los árabes y africanos,…que se establecen, trabajando (si pueden) para comer y disfrutando de las ventajas de todo tipo (sanitarias, educativas, sociales…) de los países de acogida, como en otro tiempo lo fueron las ciudades romanas.
El hambre y la muerte empujan para saltar los muros o derribarlos, antes y ahora.
3.- La descentralización de la estructura social y la crisis del control central. Fue el surgimiento de las nuevas naciones surgidas por los asentamientos bárbaros y lo son hoy las descentralizaciones del poder central, bien por el federalismo de algunas naciones, bien por el estado de las autonomías.
El antiguo feudalismo y los señores feudales, con sus prerrogativas, se encuentra hoy materializados en los parlamentos federales y autonómicos.
4.- La fragmentación de las ciudades, que daría lugar a los “Burgos”, son los equivalentes a nuestros barrios, con su mayor o menor idiosincrasia, como territorios casi privados, convertidos (muchos de ellos) en lugares peligrosos, sobre todo para los de fuera, donde las mafias locales, la violencia y el salvajismo campan a sus anchas, donde las bandas armadas controlan y permiten o prohíben, con hacinamiento, con problemas de espacio y de comunicación, con una vida diaria tan distinta a la del centro de las ciudades.
Si de aquellos “burgos” saldría la burguesía económica, industrial, financiera,… en estos barrios abunda el dinero negro, los negocios ilegales,…
En las grandes ciudades (Londres, París, Madrid,…) hay barrios chinos, turcos, griegos, rumanos, rusos, marroquíes, subsaharianos,… desgajados, marginados, con vida y funcionamiento propio.
5.- La inseguridad física y económica, sin proyectos de futuro, vida de supervivencia diaria. Ausencia de vigilancia. Reservando el centro de la ciudad, bien vigilado, como lugar de visita y de compras.
6.- Tendencia a traducir el saber y el poder en imágenes, para que, al entrar por los ojos, puedan ser consumidos. La publicidad y la propaganda, atractivas, con colores y sonidos, que puedan ser captadas al momento y atraigan a compradores.
Como en otros tiempos, con un analfabetismo generalizado, el pueblo necesitaba ver y oír los mensajes religiosos. Las catedrales, con sus vidrieras, su imaginería, su púlpito, sus cánticos, su olor a incienso, su boato y parafernalia… eran la publicidad del mensaje religioso que entraba por la vista, el olfato y el oído (ya que no podía entrar por la mente).
Hoy también se intenta que no se piense, pero que se consuma. La propaganda subliminal, inconsciente, como estrategia de la compra/venta.
7.- Gusto por la recopilación y el inventario. El coleccionismo. Acumulación de objetos, lo que conlleva su conservación. La Iglesia y el poder económico se lanzan a la recopilación de elementos culturales que instalan, conservan y copian libros, miniaturas, imaginería religiosa, arquitectura religiosa y civil,….
En los antiguos monasterios se busca todo y se guarda todo. La importancia de un monasterio está en relación a sus archivos e inventarios.
Igualmente hoy con la dosificación cultural en volúmenes, separatas, fascículos, entregas varias,… a veces para rellenar espacios de estanterías. El placer de poder decirlo y que pueda ser visto, contemplado, envidiado por los demás.
8.- Cultura de transición permanente. En este mundo todo es confuso. Se busca a Dios y éste se encuentra en el otro mundo. Hay que llegar allí y, aunque la iglesia marque los caminos por los que llegar, siempre queda la conciencia y sus remordimientos para la intranquilidad. Deseo, por una parte, pero confusión.
9.- El deterioro de las calzadas romanas, que te obliga a permanecer en el mismo lugar, por no haber caminos o, si los hubiera, su peligrosidad.
Hoy, demasiados caminos.
10.- Escasez de alimentos para las masas, sólo unos cuantos no carecen de ellos.
Hoy son países y casi continentes enteros: países superpoblados del tercer mundo. Muchas bocas y poco alimento que llevarse a la boca. Al tiempo que sobra y se desperdician alimentos en el primer mundo.
11.- Peregrinaciones y viajes, los más por motivos religiosos, los menos por objetivos políticos y económicos.
Hoy: el turismo de masas, por motivos lúdicos y vacacionales. Jerusalén, Tierra Santa, Santiago de Compostela,…. Son sustituidos por El Caribe, la costa mediterránea, países exóticos,…
12.- Misticismo y las órdenes mendicantes, que prometen el cielo eterno…
Hoy: sectas religiosas que te prometen el oro y el moro, que te captan y se quedan con tu conciencia y con tu cartera,…
13.- Epidemias y muertes en masa, negocio con las misas, oraciones,…
Hoy: epidemias o pandemias (vacas locas, aviar, porcina,…) negocio con los medicamentos.
14.- Pobreza oficial individual (hasta voto de pobreza) pero riqueza colectiva.
Hoy: pobreza real colectiva pero riqueza individual de sociedades anónimas (pero con nombre y apellidos). Paraísos fiscales.
15.- Lengua común (el latín) necesario tanto para la iglesia como para el comercio.
Hoy: lengua común y necesaria, en la “aldea global”, del inglés, convertido en la lengua de entendimiento universal, para la tecnología (hasta las instrucciones de uso o montaje de un instrumento “made in China o Tailandia o Japón o….), para la ciencia, para el turismo, para viajar,…
16.- La amenaza del Islam (antes y ahora) pero este tema merece un estudio aparte, sobre todo la facción más peligrosa del mismo (el integrismo radical islámico), en poder de armamento avanzado, de fabricación occidental, gracias a su petróleo.
Occidente montó toda su industria sobre una fuente de energía barata, de países atrasados, y ahora nos tienen cogidos por los huevos. Dependemos de ellos, al tiempo que ellos quieren destruirnos, fanatizados por ideas religiosas medievales.
17.- Las justas y los torneos, por motivos amorosos, políticos, bélicos, lúdicos,…
Hoy: acontecimientos deportivos en todo tiempo y lugar. Uno se alinea con un bando, se enamora de unos colores (como antes se enamoraba de una dama de la alta sociedad) y es capaz hasta de morir y matar por ellos. Odio entre bandos rivales, que, a veces, se politizan. Los centralistas contra los periféricos (o al revés). Identificarse con ellos.
18.- Descenso de la población (por hambre y epidemias).
Hoy: es contradictorio, los más ricos ni pasan hambre ni mueren por epidemias, pero tienen muy bajos sus índices de natalidad, al tiempo que los más pobres, pasando hambre y sufriendo enfermedades, se multiplican, reproduciendo el modelo antiguo de que dos manos más son más trabajo, son más riqueza, es más seguridad de futuro para los progenitores,…
Crecimiento demográfico donde no debería haberlo (en los países no desarrollados), por motivos religiosos, de ignorancia, por tradición,….
19.- Saturación de las ciudades romanas (al haber más servicios, hay más trabajo, existen más oportunidades, hacen falta más manos,…)
Hoy: emigración desde el campo a la ciudad, tanto por la mecanización del campo y la poca mano de obra necesaria, como por la cantidad de servicios que la ciudad necesita y oferta.
Estas ciudades, con tanta aglomeración, quedan convertidas en trampas, con problemas de todo tipo (de movilidad, circulatorios, de contaminación, psicológicos, escasez de servicios,…).
20.- Las dificultades de la comunicación, la tardanza en la llegada de información….
Hoy. Exceso de comunicación, saturación, agobio en la aldea global, todo lo que ocurre en cualquier parte del mundo es en vivo y en directo, y te afecta al momento, lo bueno y lo malo.
Es tanta la información que no da tiempo a digerirla, se va amontonando
21.- La artesanía y la poca especialización. Uno podía hacer casi todo.
Hoy: todo tiene que estar especializado para que sea avanzado. Exceso de especialización. Cada uno a lo suyo, “zapatero, a tus zapatos”.
22.- Pocos problemas, el de la supervivencia, individual y familiar, el de la comida, el de la enfermedad.
Hoy: los problemas son múltiples y tan variados que no existe UNA solución, ni económica, ni cultural, ni religiosa. Hay MUCHAS soluciones, pero para salir del paso, soluciones muy concretas, válidas sólo para ciertos problemas.
Acostumbrarse a vivir con los problemas, nunca totalmente resueltos.
Intentar detectar, desarrollar e incrementar las coincidencias, al tiempo que habrá que aparcar o pasar por encima de las diferencias, respetándolas, aunque no sean aceptadas. Tolerancia de todo lo que pueda ser tolerable, aunque respeto a la persona, siempre.
23.- Cada civilización ha tenido su Edad Media. La nuestra ha sido sólo nuestra. Mientras estábamos en ella, otras civilizaciones estaban mucho más avanzadas. Hoy, muchas se encuentran en su Edad Media.
Aunque toda Edad Media está preñada de Modernidad, que tardará más o menos en llegar. Hoy, culturas pretecnológicas acceden fácilmente a las tecnologías más avanzadas sin estar, a veces, preparadas para ello.
Mayor velocidad en la llegada de la modernidad, aprovechándose de los que ya están allí.
24.-
25.-
26.-
Puedes seguir. Te invito a que sigas.
Tomás Morales Cañedo
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06 septiembre 2010
Detalles de la descarga: PowerPoint Viewer
Muchos de ustedes sabéis que cada poco tiempo Microsoft saca un nuevo programa Office en los que los documentos realizado no son visible a versiones anteriores de Microsoft Office.
Esto ocurre con la versión Office 2007 cuyos documento Word, Excell, Access y Power Ponit no son visibles para Office 97 ni para Office 2003 o anteriores.
Hay visores que permiten ver estos archivos desde cualquier versión de Office, en este caso os envío el visor para Power Point 2007.
Pero además en la misma página de Microsft Update podéis bajar los demás.
http://www.microsoft.com/downloads/details.aspx?familyid=CB9BF144-1076-4615-9951-294EEB832823&displaylang=es
Que sea aprovechable
Andrés Tello
Perchelero
Esto ocurre con la versión Office 2007 cuyos documento Word, Excell, Access y Power Ponit no son visibles para Office 97 ni para Office 2003 o anteriores.
Hay visores que permiten ver estos archivos desde cualquier versión de Office, en este caso os envío el visor para Power Point 2007.
Pero además en la misma página de Microsft Update podéis bajar los demás.
http://www.microsoft.com/downloads/details.aspx?familyid=CB9BF144-1076-4615-9951-294EEB832823&displaylang=es
Que sea aprovechable
Andrés Tello
Perchelero
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05 septiembre 2010
CONSEJOS
1-Septiembre-2010
Mayte Tudea.
CONSEJOS AL ATARDECER
Una charla femenina de las que equivalen a dos o tres sesiones de diván psiquiátrico, nos mantuvo entretenidas desde el inicio del atardecer hasta que nos dimos cuenta de que era ya noche cerrada.
Yo creo que en este terreno las mujeres jugamos con ventaja; que nos resulta más fácil abrirnos a otras personas de nuestro propio sexo, contar nuestros problemas, y que esto a veces nos libera en parte de ellos, o logramos que adquieran una dimensión más cercana a la realidad. Nosotras sabemos manejar con mayor habilidad la espita de nuestra olla a presión, y evitar de ese modo que estalle.
Parece demostrado que nuestra inteligencia emocional está más y mejor desarrollada que la del hombre, y gracias a ello hemos podido sobrevivir a los tiempos de desigualdad y de machismo imperantes en el pasado. Actualmente se ha equilibrado bastante la balanza, aunque aún persistan “residuos” que imagino irán desapareciendo. Como es lógico, estas reflexiones únicamente resultan válidas para Occidente. Mejor no hablar de las “culturas” islámicas y de tantos lugares del planeta donde la mujer sólo es un objeto, y en su mayoría, de ínfima consideración.
Justo sería reconocer también que el hombre cuenta con otra serie de valores y de capacidades de las que nosotras no estamos tan dotadas, e incluso carecemos. Y que por fortuna somos diferentes, y por ello, quizá, complementarios.
Yo soy de las que opinan que en nuestra sociedad y en nuestro momento, no fue para nosotras todo tan opresivo como ahora nos quieren hacer creer. Y que en un porcentaje nada desdeñable, las mujeres fuimos tratadas del modo que nosotras mismas establecimos –aunque hubiera sus “tira y afloja”-, y siempre y cuando el hombre que teníamos a nuestro lado, supiera valorar y respetar a la mujer que era su compañera, bien de vida o de trabajo. Y ni qué decir tiene que el terreno del hogar y de la familia siempre ha sido nuestro reino, y lo hemos gobernado según nuestro criterio, acertado casi siempre.
En fin, todo esto con las naturales excepciones que suelen confirmar la regla, y por supuesto sin pretender establecer ningún axioma sobre las relaciones varón-mujer.
Hablaba de la inteligencia emocional femenina y de cómo nos manejamos mejor con los sentimientos que ellos. Pero habría que admitir que cuando algo nos perturba, nos obsesionamos mucho más con el tema y no siempre somos capaces
de enfrentarnos a él con determinación y por derecho. En muchas ocasiones, nos movemos por caminos sinuosos y enrevesados. Los hombres suelen “ir al grano”, son más directos.
Estas reflexiones las he ido hilvanando con posterioridad a las confidencias que me fueron hechas ese atardecer, en el que hube de improvisar unos consejos verbales –allí mismo pedidos-, que precisamente por ser tan espontáneos y poco meditados, es posible que no resultaran todo lo adecuados que yo pretendía.
Los que escribo a continuación –de tener alguna utilidad, yo soy la primera interesada-, aunque responden de un modo más elaborado a la petición formulada por una mujer, creo que podrían ser compartidos por ambos sexos, y son fruto de una convicción personal : “Sólo en nosotros mismos está la raíz de nuestro bienestar. Intentemos que florezca”.
UN CONSEJO
Un consejo. No entregues tu felicidad
en manos conocidas o extrañas,
no dependas de la voluntad
de otras personas para sentirte bien.
No creas que la alegría vendrá a ti
a través de alguien, que sólo ese alguien
será capaz de colmar tus anhelos,
de llenar tus vacíos, de disipar tus miedos.
No esperes que el teléfono suene,
ni que el cartero llame a tu puerta,
ni que te envíen mensajes escritos,
para poder afirmarte en cuanto vales.
No pienses que eres el dueño de otro ser,
ni exhibas tu contrato de propiedad;
será más tuyo si se siente libre:
sólo los objetos pueden ser poseídos.
Nunca permitas estar sometido
a los vaivenes de los demás,
porque su brújula puede desviarse
y hacer que tú pierdas el Norte.
Busca en tu interior. Encuentra allí
el amor que quieres recibir,
la ilusión que te permita soñar,
el valor para afrontar los problemas.
Consigue que la alegría fluya,
mantén alimentada la esperanza,
ejerce la empatía de continuo,
y verás florecer todos sus frutos.
Será tan abundante tu cosecha,
que podrás donar generosamente,
y aceptar como un simple regalo,
aquello que la vida quiera ofrecerte.
Mayte Tudea.
CONSEJOS AL ATARDECER
Una charla femenina de las que equivalen a dos o tres sesiones de diván psiquiátrico, nos mantuvo entretenidas desde el inicio del atardecer hasta que nos dimos cuenta de que era ya noche cerrada.
Yo creo que en este terreno las mujeres jugamos con ventaja; que nos resulta más fácil abrirnos a otras personas de nuestro propio sexo, contar nuestros problemas, y que esto a veces nos libera en parte de ellos, o logramos que adquieran una dimensión más cercana a la realidad. Nosotras sabemos manejar con mayor habilidad la espita de nuestra olla a presión, y evitar de ese modo que estalle.
Parece demostrado que nuestra inteligencia emocional está más y mejor desarrollada que la del hombre, y gracias a ello hemos podido sobrevivir a los tiempos de desigualdad y de machismo imperantes en el pasado. Actualmente se ha equilibrado bastante la balanza, aunque aún persistan “residuos” que imagino irán desapareciendo. Como es lógico, estas reflexiones únicamente resultan válidas para Occidente. Mejor no hablar de las “culturas” islámicas y de tantos lugares del planeta donde la mujer sólo es un objeto, y en su mayoría, de ínfima consideración.
Justo sería reconocer también que el hombre cuenta con otra serie de valores y de capacidades de las que nosotras no estamos tan dotadas, e incluso carecemos. Y que por fortuna somos diferentes, y por ello, quizá, complementarios.
Yo soy de las que opinan que en nuestra sociedad y en nuestro momento, no fue para nosotras todo tan opresivo como ahora nos quieren hacer creer. Y que en un porcentaje nada desdeñable, las mujeres fuimos tratadas del modo que nosotras mismas establecimos –aunque hubiera sus “tira y afloja”-, y siempre y cuando el hombre que teníamos a nuestro lado, supiera valorar y respetar a la mujer que era su compañera, bien de vida o de trabajo. Y ni qué decir tiene que el terreno del hogar y de la familia siempre ha sido nuestro reino, y lo hemos gobernado según nuestro criterio, acertado casi siempre.
En fin, todo esto con las naturales excepciones que suelen confirmar la regla, y por supuesto sin pretender establecer ningún axioma sobre las relaciones varón-mujer.
Hablaba de la inteligencia emocional femenina y de cómo nos manejamos mejor con los sentimientos que ellos. Pero habría que admitir que cuando algo nos perturba, nos obsesionamos mucho más con el tema y no siempre somos capaces
de enfrentarnos a él con determinación y por derecho. En muchas ocasiones, nos movemos por caminos sinuosos y enrevesados. Los hombres suelen “ir al grano”, son más directos.
Estas reflexiones las he ido hilvanando con posterioridad a las confidencias que me fueron hechas ese atardecer, en el que hube de improvisar unos consejos verbales –allí mismo pedidos-, que precisamente por ser tan espontáneos y poco meditados, es posible que no resultaran todo lo adecuados que yo pretendía.
Los que escribo a continuación –de tener alguna utilidad, yo soy la primera interesada-, aunque responden de un modo más elaborado a la petición formulada por una mujer, creo que podrían ser compartidos por ambos sexos, y son fruto de una convicción personal : “Sólo en nosotros mismos está la raíz de nuestro bienestar. Intentemos que florezca”.
UN CONSEJO
Un consejo. No entregues tu felicidad
en manos conocidas o extrañas,
no dependas de la voluntad
de otras personas para sentirte bien.
No creas que la alegría vendrá a ti
a través de alguien, que sólo ese alguien
será capaz de colmar tus anhelos,
de llenar tus vacíos, de disipar tus miedos.
No esperes que el teléfono suene,
ni que el cartero llame a tu puerta,
ni que te envíen mensajes escritos,
para poder afirmarte en cuanto vales.
No pienses que eres el dueño de otro ser,
ni exhibas tu contrato de propiedad;
será más tuyo si se siente libre:
sólo los objetos pueden ser poseídos.
Nunca permitas estar sometido
a los vaivenes de los demás,
porque su brújula puede desviarse
y hacer que tú pierdas el Norte.
Busca en tu interior. Encuentra allí
el amor que quieres recibir,
la ilusión que te permita soñar,
el valor para afrontar los problemas.
Consigue que la alegría fluya,
mantén alimentada la esperanza,
ejerce la empatía de continuo,
y verás florecer todos sus frutos.
Será tan abundante tu cosecha,
que podrás donar generosamente,
y aceptar como un simple regalo,
aquello que la vida quiera ofrecerte.
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